NACEN TRES LINCES IBÉRICOS EN EL ZOOBOTÁNICO
Parto Castañuela
El sábado 7 de abril nacieron tres crías de lince ibérico, el felino más amenazado del planeta, en el Zoobotánico dentro del Programa de Conservación de la Consejería de Medio Ambiente de la Junta de Andalucía. Son hijos de Castañuela e Hidrógeno. El sexo se determinará cuando se les realice el chequeo de rigor que se llevará a cabo el próximo mes, pudiendo no ser definitiva su determinación hasta pasados los cuarenta y cinco días.
Los cachorros nacieron entre las 23:30 y las 00:30 de la noche y su experimentada madre (este es su noveno parto y el cuarto consecutivo en el Zoobotánico) los limpió inmediatamente y muy pronto comenzarían a mamar.
El total de linces nacidos en Jerez son 10, de los cuales 3 ya están en libertad en Sierra Morena de Ciudad Real y Montes de Toledo.
Aunque hay cuatro centros específicos de cría de lince; Extremadura, Jaén, Doñana y el Algarve portugués, el Zoobotánico es el único Zoo del mundo que reproduce esta especie.
Estas crías fueron presentadas a los medios de comunicación por el Teniente de Alcaldesa José Antonio Díaz, la Directora del Zoobotánico Ana Timermans y el conservador del Zoobotánico Íñigo Sánchez.
Los nombres se pondrán por orden alfabético en el Programa de Conservación ex situ de lince Ibérico, siendo el personal técnico quien propone una lista de nombres (este año toca la letra "P"). Esta hembra de 12 años es la única que se mantiene en el Zoobotánico con fines reproductivos en el marco del Programa de Conservación ex situ de la especie, siendo el único zoo del mundo que participa en el mismo. Mientras, su padre “Hidrógeno”, de 7 años, permanece en una instalación contigua para dar la máxima tranquilidad a la hembra.
Esta especie se mantiene en las instalaciones del AREA (Área de Reproducción de Especies Amenazadas), en una zona no visitable del parque. Muy cerca, en la instalación de cara al público, se encuentra la abuela de los recién nacidos, “Saliega”, famosa por ser la primera hembra de lince ibérico que se reprodujo en cautividad hace ahora 13 años.
Los cachorros están siendo cuidados en todo momento por su madre y pueden ser observados por el público a través de un monitor por circuito cerrado de vídeo. El contacto humano con los animales que forman parte del este programa se reduce al máximo para que no pierdan su carácter salvaje y puedan ser reintroducidos en la naturaleza sin estar habituados al hombre, lo que les traería complicaciones. Se espera que el destino de estos cachorros cuando tengan varios meses sea su reintroducción en la naturaleza, al igual que ha ocurrido anteriormente con sus hermanos Mosto, Nitrógeno y Neón, cachorros de lince ibéricos criados por esta pareja en el zoológico que disfrutan actualmente de la vida en libertad.