LA CIGÜEÑA NEGRA SE REPRODUCE POR PRIMERA VEZ EN CAUTIVIDAD EN EL ZOOBOTÁNICO JEREZ

Al contrario de su pariente la cigüeña blanca, que gusta de la proximidad del hombre, la cigüeña negra vive en densas masas forestales, así como en riscos en sierras o roquedos fluviales. Todos estos enclaves precisan de masas de agua próximas más o menos permanentes que le suministren alimento (arroyos, ríos, charcas, colas de embalses…). Tampoco es un ave colonial, ya que las parejas nidifican totalmente aisladas. En cuanto a su alimentación, se basa en peces, además de una gran variedad de presas, como son anfibios, reptiles, invertebrados (insectos, caracoles, lombrices y cangrejos de río). El tamaño de puesta oscila entre los 2 y los 5 huevos, siendo menor su número en las aves con menos experiencia. La incubación (32-38 días) es realizada por ambos miembros de la pareja. El periodo de estancia de los pollos en el nido es de unas 9-10 semanas. Aunque no está globalmente amenazada, pues sus poblaciones en Europa del Este y Asia son aún abundantes, la población Ibérica de cigüeña negra no supera las 500 parejas reproductoras (un 20% de ellas en Portugal), por lo que está oficialmente catalogada en nuestro país como especie “En Peligro de Extinción”.