ALMENDRO (Prunus dulcis): Zoobotánico Jerez - Página oficial

Saltar al contenido principal

ALMENDRO

(Prunus dulcis)

 

Familia Rosáceas

    El nombre genérico es el que utilizaban los romanos para designar al ciruelo; este vocablo se ha utilizado para englobar a un grupo de rosáceas parecidas a él. El específico dulcis viene del latín y significa dulce, suave referencia esta a la exquisitez de sus frutos.

Árbol

    Que no suele pasar de 10-12 metros de altura, aunque lo normal es de 5 a 8 metros. Copa de forma irregular. Los árboles cultivados, a diferencia de los silvestres, tienen ramas espinosas.

Tronco

    De corteza oscura y agrietada en los ejemplares añosos.

Hojas

    Caducas, simples, alternas, de forma lanceolada, de 7-12 cm. de longitud, con los bordes finamente dentados. Poseen un corto peciolo y el color verde de intensidad media. La foliación se produce desde principios de primavera a finales de otoño.

Flores

    Hermafroditas, blancas o rosa-pálido; nacen en parejas o solitarias y son muy precoces, apareciendo antes que las hojas. Poseen cinco pétalos y numerosos estambres, de 15-30 (múltiplos de 5). La floración se produce de Enero a Marzo.

Frutos

    Drupa ovoide, consta de una envoltura poco carnosa de aspecto velloso aterciopelado, que se desprende al madurar, recogiéndose por Agosto o Septiembre.

Propagación

    Por semilla o injerto.

Crecimiento

    Rápido, muy poco exigente en cuanto a suelos; prefiere los calizos, sueltos y profundos, aunque sean pedregosos. El almendro es propio de climas templados, cálidos y secos; soporta mal las nieblas frías y los vientos húmedos, y en los lugares donde está expuesto a estas adversidades vegeta, floreciendo sin dar frutos.

Distribución

    Centro y Suroeste de Asia y Norte de África; desde estos lugares los romanos lo extendieron por toda Europa.

Utilidad

    Tiene valor ornamental y se usa como patrón de injerto de frutales de hueso, especialmente melocotoneros. Pero su importancia radica en sus frutos dado el gran número de aplicaciones que se les da. Las cáscaras de las almendras, trituradas, sirven para falsificar la canela, y se ha empleado para trasformar en coñac los vinos blancos añejos.

top